Alta cocina con música en directo en el Primavera Sound

Con unas vistas privilegiadas a los conciertos que esperan un mayor número de asistentes, el Primavera Sound estrenó ayer la Terrassa d’Estrella Damm, una propuesta inédita en el festival que cuenta con servicio en mesa, capacidad para 160 comensales por turno y un menú firmado por algunos de los chefs más reconocidos del panorama catalán.
La nueva propuesta reúne las creaciones de Oriol Castro, Eduard Xatruch, Mateu Casañas y Nil Ducet (Disfrutar y Compartir), Nandu Jubany (Can Jubany) y Artur Martínez (El Buen Gusto 1952) en un menú cerrado al precio de 45 euros. Para acceder a esta terraza es imprescindible reservar mesa a través de la app oficial.
La nueva propuesta reúne las creaciones de Oriol Castro, Eduard Xatruch, Mateu Casañas y Nil Ducet (Disfrutar y Compartir), Nandu Jubany (Can Jubany) y Artur Martínez (El Buen Gusto 1952)El recorrido gastronómico arranca con tres entrantes pensados para abrir el apetito mientras se disfruta de la música: una tapa fresca de buey de mar con ponzu y crema de aguacate que el equipo del mejor restaurante del mundo sirve desde hace tiempo en su barcelonés Compartir; la mítica croqueta de jamón ibérico, crujiente y melosa, de Nandu Jubany; y un sorprendente bikini coreano de Artur Martínez, con el que reinterpreta de forma contemporánea el clásico bocadillo añadiéndole frescura y complejidad con la intención, dice el cocinero, de representar “lo que es la esencia de un festival”.

Pletórico arranque del Primavera Sound
Àlex GarciaComo plato principal el comensal puede elegir entre tres propuestas distintas: un jugoso lomo de vaca madurada a la brasa con pimientos del piquillo confitados, un delicado suquet de rape de la costa, y una alternativa vegetal de temporada. Para cerrar, un postre que apela a la nostalgia: pan con chocolate, aceite y sal (el dulce preferido de la mismísima Rosalía).
Como plato principal el comensal puede elegir entre tres propuestas distintasLa presencia de estos reconocidos cocineros en el Primavera tiene además como objetivo visibilizar la cocina catalana en un año en el que Catalunya es Región Mundial de la Gastronomía. “Cuando vas a un concierto tan grande que los restaurantes de la ciudad estén presente es my importante. Viene gente de toda Europa y es un buen escaparate. En Barcelona mucha gente vivimos del turismo”, asegura a La Vanguardia el chef Oriol Castro.
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