Precandidatos cuestionan decisión del presidente de decretar consulta popular en foro de Asobancaria

Este jueves se llevó a cabo la segunda jornada de ‘La voz de los presidenciables’, foro en el marco de la edición 59 del Congreso de Asobancaria. El diálogo fue moderado por Andrés Mompotes, director de EL TIEMPO; Juan Roberto Vargas, director de Noticias Caracol; y José Manuel Acevedo, director de Noticias RCN. El turno en esta ocasión fue para David Luna, Paloma Valencia, Miguel Uribe, Claudia López y Francisco Barbosa.

La mayoría de la conversación rondó en cuanto a la crisis institucional que implica para el país que el presidente Gustavo Petro convoque a la consulta por popular por decreto, desconociendo la voluntad del Senado de negar la petición. Desde la primera pregunta hubo ese tono, cuando se les cuestionó a los precandidatos sobre las razones que tenían para aspirar a la Presidencia.

“Antes de ser presidente quiero que la democracia siga funcionando y lamentablemente estamos en unos momentos muy críticos. La Constitución, la separación de poderes y la institucionalidad están en riesgo”, de esta forma inició David Luna, que le pidió a sus compañeros de panel que firmaran un compromiso de defender la separación de poderes. Todos pusieron su firma en dicho documento.

Paloma Valencia cambió un poco el tono para cuestionar la cantidad de oportunidades que ha tenido el país en el último tiempo y que no han sido aprovechadas. “Estoy cansada de que en un país que está lleno de oportunidades, pero no es capaz de bajarse de la bicicleta estática. Colombia debe convertirse en un país de oportunidades”, declaró.

Miguel Uribe fue un duro crítico de la administración Petro y afirmó que en su gobierno habría un énfasis en seguridad: “Sin seguridad no hay nada, seguridad física, seguridad jurídica y seguridad institucional”. A lo que añadió: “Nos están devolviendo un pasado de violencia que no queremos volver. Un país sin violencia es mi propósito de vida. El único camino para la paz es la seguridad”. Uribe aseguró que un énfasis en seguridad crearía un círculo armónico que traería confianza inversionista y crecimiento económico para el país. Luego lanzó su propuesta de reducción del aparato estatal.

La siguiente en intervenir fue Claudia López, que destacó su trayectoria como alcaldesa de Bogotá, sobre todo en el manejo de la pandemia y el estallido social. En esa línea indicó que parte de la campaña no puede enfocarse en lamentarse por la promesa de cambio incumplida del gobierno Petro. “No quedarnos en el lamento de lo que pudo haber sido y no fue. Debemos recuperar la seguridad”, indicó. En esa línea dijo que en los próximos cuatro años se debe recuperar la salud, el trabajo y el empleo, que se habrían perdido durante la actual administración.

El encargado de cerrar el primer segmento fue el exfiscal Francisco Barbosa, que aseguró que desde su Fiscalía advirtió del daño institucional que estaría llevando a cabo el actual Presidente. “Protegí la separación de poderes, advertí de la crisis institucional”; indicó Barbosa, que habló de un supuesto ataque desde el Ejecutivo a la separación de poderes y a la Constitución. En esa línea, Barbosa se catalogó como un candidato de consensos y pidió que, si llega a haber una coalición de partidos tradicionales, sea tenido en la consulta de marzo.

La conversación siguió por un tono muy similar al ser cuestionados los precandidatos por su opinión con el decreto para convocar la consulta popular. El primer turno fue para Paloma Valencia, que resumió toda la situación en que el presidente Petro estaría buscando “rompimientos institucionales”. En esa línea afirmó que el decreto sería un acto de prevaricato y que ya están preparando una estrategia para demandar la orden presidencial y para pedirle a la Procuraduría que intervenga con la excepción de constitucionalidad.

Miguel Uribe también dijo tener lista una demanda cuando se conozca el decreto. “A este gobierno lo vamos a seguir enfrentando. Somos más los que creemos en el Estado de derecho”, indicó el senador del Centro Democrático, que a renglón seguido anunció que recibiría a Eduardo Montealegre, futuro ministro de Justicia, con una moción de censura por haber apoyado la tesis de decretar la consulta popular desconociendo la voluntad del Senado.

“La democracia hay que defenderla”, fue la respuesta de López a la postura frente a la consulta popular. Sin embargo, aseveró que todo esto hace parte de una estrategia del presidente Petro para desviar la atención de los temas importantes del país. “El presidente nos va a provocar todos los días para tenernos discutiendo y no le denunciemos la corrupción”, indicó. No obstante, aseguró que está segura de que en 2026 habrá elecciones y que el petrismo será derrotado.

Barbosa insistió en su mensaje de que el presidente Petro habría desconocido a distintas instancias institucionales y criticó este proceder: “Estábamos acostumbrados a que los criminales golpeaban la institucionalidad, pero nadie vio que el Presidente golpeó la institucionalidad”, indicó.

Al cierre de ese de segundo bloque, el exsenador David Luna insistió en que se debía firmar la declaración en contra de la consulta popular. “No renunciemos a la pedagogía y contemos las grandes dificultades que implica romper la institucionalidad. El gobierno debe entender que la Constitución se respeta”, declaró.

El siguiente tema fue el actual déficit fiscal, fue en este punto que Miguel Uribe hizo énfasis en sus tesis de recorte del aparato estatal. “La medida concreta es recortar gastos innecesarios. El primer año recortamos 25 billones: 22 billones de gasto de personal y 3 billones de prestación de servicio”, indicó. En esa línea habló de bajar impuestos como una forma de traer inversión.

Barbosa calificó como inviable la propuesta de bajar impuestos, pues el estado fiscal del país lo impide, pero indicó que la mejor forma de encontrar recursos es comenzar a destrabar los procesos que están pausados en la “Autoridad Nacional de Licencias Ambientales”.

La propuesta de David Luna para atender lo que denominó un “estallido fiscal” fue congelar el presupuesto de los próximos cuatro años. Por su parte, Claudia López habló que la mejor forma de reactivar la economía sería explotando todas las fuentes de energía, incluyendo el fracking. Dicha postura fue criticada por algunos sectores, que recordaron que esta hizo parte de la Alianza Verde.

De igual manera, hubo preguntas sobre temas de seguridad, en la que la mayoría de los aspirantes habló de una nueva inversión en equipamiento, como en 2002, y destacaron el papel que tiene que jugar la Fiscalía para la judicialización de los grupos criminales. En esa misma línea, varios de los consultados apuntaron a que acabarían con varios de los puntos de la ‘paz total del gobierno de Gustavo Petro.

También se preguntó sobre Estados Unidos y la difícil relación actual. Hubo divergencia de posturas. Mientras que los sectores de derecha hicieron énfasis en reducir el tema de les hectáreas de coca como mensaje para tratar de recomponer las relaciones, Claudia López indicó que debía verse de forma realista la relación con dicho país pues su s prioridades cambiaron.

Esto fue seguido por la pregunta sobre cómo reaccionar con el tema Venezuela. La postura principal fue no legitimar el régimen de Nicolás Maduro. De ahí variaron la ruta a seguir. Por ejemplo, Barbosa indicó que el aspecto de Venezuela “no se va a resolver con bravuconadas. Tener espíritu pragmático”. Por su parte, López habló de que debe hacerse un bloque con Brasil, Guyana y Estados Unidos para responder al reto que implica dicho país.

Otras preguntas fueron sobre la crisis de salud y la necesidad de recuperar la confianza. En este último caso, los candidatos indicaron que más allá de hablar de defender la democracia se debe buscar dar resultados para que la gente no busque otras formas de gobierno que les signifique mayor bienestar.

Por último, hubo una ronda de preguntas sí y no. Todos rechazaron la llegada de Eduardo Montealegre como ministro de Justicia. Miguel Uribe y Claudia López fueron los únicos que se opusieron a limitar las alocuciones, uno de los temas controvertidos de la actual administración. López y Barbosa coincidieron en rechazar posibles restricciones de libertades ciudadanas en zonas de conflicto.

En cuanto a la pregunta de si pondrían peajes a las motos, Claudia López fue la única que dijo que sí. Todos los precandidatos le dijeron no a una constituyente o a tramitar una reforma constitucional para habilitar la reelección. Los aspirantes coincidieron en su confianza en la Registraduría y en la democracia colombiana.

Por otro lado, al unísono negaron la posibilidad de cobrar impuestos a las iglesias y coincidieron en que se debía despedir a Ricardo Roa de Ecopetrol. Por otra parte, Miguel Uribe fue el único que dijo tener intenciones de mantener el impuesto del cuatro por mil y Claudia López fue la única que aseveró que no reanudaría las fumigaciones con glifosato.

Al cierre se les preguntó por posibles apoyos del uribismo y petrismo. Luna rechazó ambos sectores, mientras que el resto, con excepción de Claudia López, dijo estar satisfechos con recibir apoyos del uribismo más no del petrismo. López no negó ningún apoyo, pero al final explicó que no iría con ningún sector mencionado pues el uribismo es pasado y el petrismo falló.