Alcalde de Guanajuato explota contra motociclistas que no usan casco

El presidente municipal de Santa Cruz de Juventino Rosas, en Guanajuato, Fidel Armando Ruiz Ramírez, expresó públicamente su molestia contra los motociclistas que se niegan a usar casco, a pesar de que se trata de una medida básica para prevenir lesiones graves y muertes. En un mensaje contundente, el edil señaló que está considerando seriamente dejar de intervenir en casos de accidentes si los conductores no acatan la ley: “Ya estoy pensando seriamente en dejar que se rompan su madre si quieren usar casco o no”, declaró.
La postura del alcalde surge tras semanas de tensión entre las autoridades municipales y un sector de la población, derivadas de la aplicación estricta del Reglamento de Tránsito, en especial las sanciones por no portar casco de seguridad.
En Santa Cruz de Juventino Rosas, el uso de motocicletas se ha incrementado notablemente en los últimos años, al punto de que, según estimaciones municipales, existe una moto por cada familia. Este crecimiento ha venido acompañado de un aumento en el número de accidentes, muchos de ellos con consecuencias graves debido a la falta de equipo de protección.
El alcalde recordó que las motocicletas son, actualmente, el vehículo predilecto para desplazarse en la región, lo que hace indispensable regular su uso y generar conciencia sobre los riesgos. Sin embargo, a pesar de que los operativos de tránsito se implementaron en respuesta a peticiones ciudadanas, la reacción de varios conductores ha sido negativa.
Durante la última semana, las autoridades locales, en conjunto con la Policía de Tránsito, iniciaron operativos de supervisión que incluían multas y el retiro de unidades para quienes no cumplían con las normas. Entre las sanciones más comunes estuvo la de no portar casco, que generó enojo y protestas de parte de algunos motociclistas.
En uno de los incidentes, un ciudadano fue multado tras agredir físicamente a un agente de tránsito que le solicitó cumplir con la ley. Además, las autoridades aseguraron entre 10 y 15 motocicletas durante los operativos, lo que derivó en insultos y agresiones verbales hacia los oficiales, a quienes algunos llamaron “pinches hambreados” y “pinches tránsitos”.
La respuesta de ciertos sectores de la población llevó a que Fidel Ruiz expresara su frustración públicamente. Según el edil, existe una doble moral ciudadana: por un lado, exigen que el gobierno haga cumplir las normas; por el otro, reaccionan con enojo y desobediencia cuando se aplican sanciones.
Ruiz señaló que no está dispuesto a exponer a los agentes de tránsito a faltas de respeto o agresiones y que, de continuar esta situación, podría suspender los operativos. Asimismo, advirtió que, si un motociclista sufre un accidente sin llevar las medidas de seguridad requeridas, ni el gobierno municipal ni la funeraria de su propiedad brindarán apoyo.
El caso ha abierto un debate sobre la responsabilidad de los conductores en el cumplimiento de las normas de seguridad vial. Expertos señalan que el uso del casco reduce en más de un 40% el riesgo de muerte y hasta en un 70% el riesgo de lesiones graves en accidentes de motocicleta. No obstante, la resistencia cultural y la percepción de que es una imposición siguen siendo barreras importantes.
Ruiz insistió en que su administración busca proteger vidas y mejorar la movilidad, no generar confrontación. Sin embargo, reiteró que la seguridad vial depende tanto de las autoridades como de la cooperación de la ciudadanía.
Las declaraciones del alcalde de Santa Cruz de Juventino Rosas reflejan la tensión entre hacer cumplir la ley y enfrentar la resistencia social a medidas de seguridad básicas. Mientras las cifras de accidentes en motocicleta continúan al alza, el desafío para las autoridades será equilibrar el control y la educación vial para lograr que la prevención de tragedias no dependa únicamente de sanciones, sino de la conciencia ciudadana.
La Verdad Yucatán