Se estrena este mes una película sobre el desalojo de vecinos de Alta de Coimbra

El documental “Salatinas”, que se estrena este mes, cuenta la historia de las tres mil personas expulsadas de la antigua Alta de Coimbra, para dar paso a la ciudad universitaria idealizada por el Estado Novo, y la resistencia identitaria de las comunidades.
El estreno del documental “Salatinas – Histórias da Velha Alta de Coimbra” tendrá lugar el domingo 22 de junio, a las 21 horas, en el Largo da Porta Férrea de la Universidad de Coimbra, en el marco de la iniciativa “Sons da Cidade”, en la propia Alta, de donde fueron expulsadas tres mil personas en los años 1940.
El proyecto busca retratar la transformación urbana de Alta, realizada a través de desalojos forzosos y la destrucción de 255 edificios, pero también las formas de resistencia encontradas por las Salatinas (personas nacidas en esa zona de la ciudad), que crearon “otras altas”, dijeron a la agencia de noticias Lusa Rafael Vieira y Filipa Queiroz, quienes junto a Tiago Cerveira realizan el documental.
La idea de la película surgió del reportaje que Rafael Vieira, de formación en arquitectura, escribió sobre las Salatinas para la revista local Coimbra Coolectiva, de la que en ese momento era directora Filipa Queiroz.
A esto le siguió un libro de Rafael para la Fundación Francisco Manuel dos Santos sobre el tema, pero, en el proceso, comenzó a gestarse un documental con Filipa Queiroz y también con el director y fotógrafo Tiago Cerveira.
El documental presenta entrevistas con salatinas que fueron desplazadas, descendientes que preservan sus memorias e identidad, así como expertos que contextualizan esa transformación urbana, cuenta Rafael Vieira a Lusa.
La película utiliza imágenes y fotografías encontradas en colecciones personales y archivos del Ayuntamiento y de la Universidad, un vídeo inédito de la antigua Alta y de las demoliciones, cartas de quejas de expropiados e incluso una grabación de un guitarrista de Salatina de los años 1920 (además de la banda original compuesta por Gonçalo Parreirão).
El documental está dividido en tres capítulos, centrándose en cómo fue y cómo fueron las vivencias de la antigua Alta, la destrucción de esos barrios históricos y su transformación en ciudad universitaria, y los barrios a los que fueron enviados los Salatinas.
En la película, el equipo se centra en los realojamientos en el Bairro de Celas, Fonte do Castanheiro y Norton de Matos, en un proceso que también mostró “la perversidad por parte del Estado Novo”, con la división de las Salatinas por clases económicas, explica Rafael Vieira, señalando el caso del Bairro Norton de Matos, donde se trasladó a personas de clase media, lo que refleja la calidad de la construcción y la existencia de equipamientos y servicios, a diferencia de otros barrios.
Además, en Norton de Matos, la gente “pagaba alquiler y, después de 25 años, tenía posesión de la casa”, dice Rafael Vieira, considerando que esa característica provocó una dilución de la comunidad.
En el caso de Celas o Fonte do Castanheiro, “permanece una identidad comunitaria mucho más fuerte y presente”, constata.
“Hay una cuestión barrial muy fuerte que no se ve en otros lugares y que es alimentada incluso por generaciones que ya no crecieron en Alta, que crecieron en los barrios”, añade Filipa Queiroz.
Para Rafael, “la gente creaba sus propias Altas”.
Encontraron una manera de recuperar sus experiencias y crearon otra Feira dos Lázaros, otras hogueras. Hay una resistencia identitaria, dice.
Filipa Queiroz añade que la resistencia pasa por el orgullo y la preservación de la memoria, algo que también está presente en las colecciones y en las historias que se transmiten de generación en generación.
“Hablamos, sobre todo, de gente que tenía trabajo, los llamados chismosos, a quienes casi nunca se les escucha. Y aquí, en la realidad de Coímbra, creo que, en general, a los médicos se les da más voz que a los chismosos”, dijo el periodista.
La historia de estas personas se escuchará ahora el 22 de junio, en el seno de la Universidad de Coimbra, y después se proyectará en festivales, con la esperanza de que llegue a los cines nacionales a finales de este año.
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