Artista regalará dinero en el festival Imaginarius para probar la sumisión al capitalismo

Un artista suspendido a 20 metros de altura distribuirá dinero real en Imaginarius – Festival Internacional de Teatro de Calle de Santa Maria da Feira, a través de desafíos lanzados a los espectadores para probar su nivel de sumisión al capitalismo.
En el marco del evento que llevará a la ciudad 43 compañías del distrito de Aveiro y del Área Metropolitana de Oporto del 22 al 25 de mayo, el espectáculo en cuestión es “Actos de Liberación” y está producido por el colectivo español Money for Free, cuyo director artístico, Sergi Estebanell, promete una intervención “poético-política” a las 18.30 horas del día 24, cuyo objetivo es “conmover, romper barreras, capturar el momento presente y promover una reflexión profunda”.
En la práctica, el personaje descrito como “John Fisherman” será suspendido de un edificio y, bajo una capa impermeable amarilla, sin mostrar su rostro, lanzará sobre la multitud una caña de pescar con cebo por valor de hasta 200 euros. Mientras tanto, otros dos miembros del colectivo estarán en el terreno instando a los espectadores a seleccionar quién merece recibir la cantidad que el pescador propone liberar.
“John realmente da el dinero y la gente hace lo que quiere con él”, aseguró Estebanell en una entrevista con Lusa. “Quienes más ganan son los espectadores que son especialmente creativos en cómo conseguirlo o quiénes deciden el público que deben recibirlo”, añade.
Independientemente de las reacciones observadas, el director del colectivo Money for Free asegura que no existe un comportamiento correcto o incorrecto: “El espectáculo es simplemente un espejo de nuestra sociedad capitalista porque lo que sucede durante la actuación refleja quiénes somos”.
“Algunos buscan activamente el dinero, otros no creen en lo que está pasando, otros proponen ideas, reglas y acciones para cambiar las cosas... Algunos se enojan, se frustran, y otros se van”, explicó.
Tras el estreno del proyecto en 2018 en el festival catalán Fira Tàrrega y más de 80 proyecciones en 20 países, Estebanell confiesa que todavía le impresiona cuando el público de “Acts of Liberation” se emociona y participa genuinamente en la performance. Sobre esos momentos, recuerda cómo “algunas personas se liberaron del símbolo del dinero realizando bellos gestos: compartiéndolo con quienes lo necesitan, haciendo declaraciones anticapitalistas, comiéndolo, quemándolo o dejándolo volar en un globo”.
La muestra cumple así el objetivo de promover la reflexión colectiva e individual sobre el culto al dinero, consciente de que toda acción tiene consecuencias.
Creo que vivimos en una sociedad cada vez más individualista, narcisista y egocéntrica. Para lograr algo juntos, tenemos que reconectar tanto con desconocidos como con nuestros seres queridos, porque una conexión emocional puede ser el punto de partida para la transformación social, argumenta Estebanell.
En este esfuerzo por una convivencia que pretende ser tolerante y empática, el artista español advierte, sin embargo, de la necesidad de evitar el extremismo, sea cual sea la ideología que lo sustente. “Me preocupan los extremos, las peleas entre pares, el pensamiento rígido, la sistematización y automatización de la humanidad: cuando dejamos de mirar a los demás, abrazarlos, cuidarlos”, admite.
Por eso mismo, Estebanell está convencido de que su ámbito profesional tiene un papel activo que desempeñar en la “nueva era” en la que vivimos: “Tenemos que escuchar y comprender a los demás, no sólo desde un punto de vista racional, sino también físico y emocional, y el arte es esencial para conseguirlo”.
Un artista suspendido a 20 metros de altura distribuirá dinero real en Imaginarius – Festival Internacional de Teatro de Calle de Santa Maria da Feira, a través de desafíos lanzados a los espectadores para probar su nivel de sumisión al capitalismo.
En el marco del evento que llevará a la ciudad 43 compañías del distrito de Aveiro y del Área Metropolitana de Oporto del 22 al 25 de mayo, el espectáculo en cuestión es “Actos de Liberación” y está producido por el colectivo español Money for Free, cuyo director artístico, Sergi Estebanell, promete una intervención “poético-política” a las 18.30 horas del día 24, cuyo objetivo es “conmover, romper barreras, capturar el momento presente y promover una reflexión profunda”.
En la práctica, el personaje descrito como “John Fisherman” será suspendido de un edificio y, bajo una capa impermeable amarilla, sin mostrar su rostro, lanzará sobre la multitud una caña de pescar con cebo por valor de hasta 200 euros. Mientras tanto, otros dos miembros del colectivo estarán en el terreno instando a los espectadores a seleccionar quién merece recibir la cantidad que el pescador propone liberar.
“John realmente da el dinero y la gente hace lo que quiere con él”, aseguró Estebanell en una entrevista con Lusa. “Quienes más ganan son los espectadores que son especialmente creativos en cómo conseguirlo o quiénes deciden el público que deben recibirlo”, añade.
Independientemente de las reacciones observadas, el director del colectivo Money for Free asegura que no existe un comportamiento correcto o incorrecto: “El espectáculo es simplemente un espejo de nuestra sociedad capitalista porque lo que sucede durante la actuación refleja quiénes somos”.
“Algunos buscan activamente el dinero, otros no creen en lo que está pasando, otros proponen ideas, reglas y acciones para cambiar las cosas... Algunos se enojan, se frustran, y otros se van”, explicó.
Tras el estreno del proyecto en 2018 en el festival catalán Fira Tàrrega y más de 80 proyecciones en 20 países, Estebanell confiesa que todavía le impresiona cuando el público de “Acts of Liberation” se emociona y participa genuinamente en la performance. Sobre esos momentos, recuerda cómo “algunas personas se liberaron del símbolo del dinero realizando bellos gestos: compartiéndolo con quienes lo necesitan, haciendo declaraciones anticapitalistas, comiéndolo, quemándolo o dejándolo volar en un globo”.
La muestra cumple así el objetivo de promover la reflexión colectiva e individual sobre el culto al dinero, consciente de que toda acción tiene consecuencias.
Creo que vivimos en una sociedad cada vez más individualista, narcisista y egocéntrica. Para lograr algo juntos, tenemos que reconectar tanto con desconocidos como con nuestros seres queridos, porque una conexión emocional puede ser el punto de partida para la transformación social, argumenta Estebanell.
En este esfuerzo por una convivencia que pretende ser tolerante y empática, el artista español advierte, sin embargo, de la necesidad de evitar el extremismo, sea cual sea la ideología que lo sustente. “Me preocupan los extremos, las peleas entre pares, el pensamiento rígido, la sistematización y automatización de la humanidad: cuando dejamos de mirar a los demás, abrazarlos, cuidarlos”, admite.
Por eso mismo, Estebanell está convencido de que su ámbito profesional tiene un papel activo que desempeñar en la “nueva era” en la que vivimos: “Tenemos que escuchar y comprender a los demás, no sólo desde un punto de vista racional, sino también físico y emocional, y el arte es esencial para conseguirlo”.
Un artista suspendido a 20 metros de altura distribuirá dinero real en Imaginarius – Festival Internacional de Teatro de Calle de Santa Maria da Feira, a través de desafíos lanzados a los espectadores para probar su nivel de sumisión al capitalismo.
En el marco del evento que llevará a la ciudad 43 compañías del distrito de Aveiro y del Área Metropolitana de Oporto del 22 al 25 de mayo, el espectáculo en cuestión es “Actos de Liberación” y está producido por el colectivo español Money for Free, cuyo director artístico, Sergi Estebanell, promete una intervención “poético-política” a las 18.30 horas del día 24, cuyo objetivo es “conmover, romper barreras, capturar el momento presente y promover una reflexión profunda”.
En la práctica, el personaje descrito como “John Fisherman” será suspendido de un edificio y, bajo una capa impermeable amarilla, sin mostrar su rostro, lanzará sobre la multitud una caña de pescar con cebo por valor de hasta 200 euros. Mientras tanto, otros dos miembros del colectivo estarán en el terreno instando a los espectadores a seleccionar quién merece recibir la cantidad que el pescador propone liberar.
“John realmente da el dinero y la gente hace lo que quiere con él”, aseguró Estebanell en una entrevista con Lusa. “Quienes más ganan son los espectadores que son especialmente creativos en cómo conseguirlo o quiénes deciden el público que deben recibirlo”, añade.
Independientemente de las reacciones observadas, el director del colectivo Money for Free asegura que no existe un comportamiento correcto o incorrecto: “El espectáculo es simplemente un espejo de nuestra sociedad capitalista porque lo que sucede durante la actuación refleja quiénes somos”.
“Algunos buscan activamente el dinero, otros no creen en lo que está pasando, otros proponen ideas, reglas y acciones para cambiar las cosas... Algunos se enojan, se frustran, y otros se van”, explicó.
Tras el estreno del proyecto en 2018 en el festival catalán Fira Tàrrega y más de 80 proyecciones en 20 países, Estebanell confiesa que todavía le impresiona cuando el público de “Acts of Liberation” se emociona y participa genuinamente en la performance. Sobre esos momentos, recuerda cómo “algunas personas se liberaron del símbolo del dinero realizando bellos gestos: compartiéndolo con quienes lo necesitan, haciendo declaraciones anticapitalistas, comiéndolo, quemándolo o dejándolo volar en un globo”.
La muestra cumple así el objetivo de promover la reflexión colectiva e individual sobre el culto al dinero, consciente de que toda acción tiene consecuencias.
Creo que vivimos en una sociedad cada vez más individualista, narcisista y egocéntrica. Para lograr algo juntos, tenemos que reconectar tanto con desconocidos como con nuestros seres queridos, porque una conexión emocional puede ser el punto de partida para la transformación social, argumenta Estebanell.
En este esfuerzo por una convivencia que pretende ser tolerante y empática, el artista español advierte, sin embargo, de la necesidad de evitar el extremismo, sea cual sea la ideología que lo sustente. “Me preocupan los extremos, las peleas entre pares, el pensamiento rígido, la sistematización y automatización de la humanidad: cuando dejamos de mirar a los demás, abrazarlos, cuidarlos”, admite.
Por eso mismo, Estebanell está convencido de que su ámbito profesional tiene un papel activo que desempeñar en la “nueva era” en la que vivimos: “Tenemos que escuchar y comprender a los demás, no sólo desde un punto de vista racional, sino también físico y emocional, y el arte es esencial para conseguirlo”.
Diario de Aveiro