Encienden la estufa en julio: La temperatura en el centro de la ciudad es de 35 grados.


La familia, que cría ganado en una tienda de campaña en una zona situada a 1.900 metros de altitud y a 25 kilómetros del centro de la ciudad, utiliza una estufa para protegerse del frío repentino de la noche.

En la montaña Ahır, donde predomina el clima de montaña, las temperaturas pueden superar los 30 grados Celsius durante el día y bajar de los 10 grados Celsius por la noche. Por ello, la familia que vive en tiendas de campaña a veces busca la sombra durante el calor del mediodía y se calienta junto a la estufa por la noche.

La familia, que se gana la vida con la ganadería, pastorea sus cabras y ovejas durante el verano para producir productos como leche, queso y yogur. Ante la dificultad para cubrir sus necesidades básicas en la región, de difícil acceso, la familia permanecerá en las montañas hasta el invierno.

Emine Demircik, residente local, comentó: «Mientras que los demás no soportan el calor de 40-50 grados, nosotros vivimos como en invierno. Nos dedicamos a la ganadería. Tenemos un refrigerador natural subterráneo donde almacenamos nuestros productos. La estufa es agradable en verano y en ella preparamos nuestro té. Se puede llegar al centro en media hora, pero como estamos en la cima, hace frío. Encendemos la estufa en verano».
ntv