Los mejores soportes de TV para mejorar tu espacio

No querrás complicarte con soportes de TV baratos. Nada te arruina el día más rápido que ver tu OLED de $2,000 tirado al suelo por ser tacaño. Consigue un soporte que se ajuste al peso y tamaño de tu televisor, e incluso elige uno de una talla más grande si estás al límite (o si planeas cambiar de modelo en el futuro). Esos soportes articulados también valen la pena, ya que te permiten sacar el televisor, girarlo e inclinarlo para eliminar el reflejo cuando el sol entra a raudales por las ventanas. Y, por Dios, ¡monta ese aparato en los montantes de la pared!

Tipo de montaje : Hay tres tipos de montaje, incluidos fijo, inclinable y de movimiento completo:

• Fijo : Un soporte fijo es la opción más básica. Es económico, sencillo y cumple su función. La ventaja es su solidez, ya que no tiene piezas móviles que puedan soltarse o chirriar. ¿La desventaja? Una vez instalado, no se mueve. No se inclina, gira ni necesita ajustes. Así que es mejor estar completamente seguro de su ubicación antes de empezar a taladrar, porque la única forma de reposicionarlo es empezar todo el proceso desde cero.
• Inclinación : Los soportes inclinables permiten ajustar el ángulo vertical de la pantalla, lo cual es fundamental al montar el televisor sobre la chimenea. Si te empiezan a doler los músculos del cuello por mirar la pantalla, puedes inclinar el soporte hacia abajo para una visión más cómoda. También son una gran ayuda si tu sala recibe mucha luz solar, ya que ayudan a reducir el deslumbramiento. No son tan llamativos como los soportes articulados, pero sin duda son más útiles que la opción fija por solo unos pocos dólares más.
• Movimiento completo : Te permiten separar el televisor de la pared, girarlo a la izquierda o a la derecha e inclinarlo hacia arriba y hacia abajo. Básicamente, coloca la pantalla exactamente donde quieras, cuando quieras. ¿Viene tu vecino y tu sofá está en un ángulo extraño? No hay problema, simplemente abrázalo. Son más caros que las opciones básicas, claro, pero pueden funcionar mucho mejor según tu configuración.

Tamaño y peso soportados : Después de encontrar el tipo de soporte que mejor se adapte a tu espacio, es hora de comprobar los límites de peso y tamaño que soporta. La descripción del soporte debería indicar la capacidad (como "32-65 pulgadas" y "hasta 45 kg"). Hazte un favor y no te quedes corto; si tu televisor pesa 29 kg, no compres un soporte con capacidad para exactamente 29 kg. Elige un tamaño mayor para tener más espacio, sobre todo si planeas añadir una barra de sonido u otros accesorios a tu equipo.

A continuación, debes comprobar el patrón VESA de tu televisor, es decir, los orificios de montaje en la parte trasera. Aparecerá como 400 x 400 mm o 600 x 400 mm en el manual del televisor o en la página web del fabricante. Si ya has perdido el manual (por supuesto), coge una cinta métrica y comprueba tú mismo la distancia entre los orificios. La mayoría de los soportes decentes son compatibles con varios patrones VESA, pero compruébalo bien antes de comprarlos.

Ajustes posteriores al montaje : Mira, no todos son como Tim "el Manitas" Taylor, así que si montas tu televisor y descubres que no está del todo nivelado, no tienes que empezar de cero. Algunos soportes premium incluyen ajustes posteriores a la instalación, lo que te permite hacer pequeños ajustes una vez que todo esté montado. Créeme, incluso una ligera inclinación te volverá completamente loco. Sin opciones de ajuste, tendrás que desmontarlo todo y empezar de cero.

Certificación UL : Cuando un soporte cuenta con la certificación UL, significa que ha sido sometido a exhaustivos protocolos de prueba por Underwriters Laboratories, una empresa independiente especializada en ciencias de la seguridad. Han sometido estos soportes a pruebas de resistencia que superan los parámetros de uso normal para verificar su integridad estructural, la capacidad de peso y la durabilidad a largo plazo. Si bien puede representar una inversión inicial ligeramente mayor, sin duda es mejor que tener que reemplazar un televisor que se cayó en mitad de la noche. Dicho esto, un soporte sin certificación UL no es necesariamente malo: existen muchas buenas opciones sin el sello.