La obesidad infantil supera por primera vez al bajo peso en el mundo

Cerca de 188 millones de niños y adolescentes en el mundo viven con obesidad, lo que equivale a 1 de cada 10.
iStock
Por primera vez en la historia, el número de niños con obesidad ha superado al de aquellos con bajo peso. Así lo señala un nuevo informe de Unicef basado en datos de más de 190 países, que concluye que cerca de 188 millones de menores de entre 5 y 19 años viven actualmente con obesidad, lo que equivale a uno de cada diez en el mundo.
El análisis muestra que mientras la prevalencia de bajo peso ha disminuido desde el año 2000, las tasas de obesidad se han triplicado. “Este dramático cambio en el panorama de la malnutrición pone en peligro la salud y el potencial futuro de los niños, las comunidades y las naciones”, advierte el informe.
(Lea: Psicólogo explicó cuáles son las profesiones con mayor presencia de rasgos psicopáticos)
El estudio identifica el reemplazo de las dietas tradicionales por alimentos ultraprocesados como una de las principales causas. Estos productos, que suelen ser más baratos y de alta carga calórica, están modificando los hábitos de alimentación en todas las regiones del planeta.
La obesidad infantil, considerada una forma grave de sobrepeso, está vinculada con un mayor riesgo de enfermedades crónicas como diabetes tipo 2, afecciones cardiovasculares y algunos tipos de cáncer en etapas posteriores de la vida. Catherine Russell, directora ejecutiva de Unicef, advirtió que en muchos países se observa “la doble carga de la malnutrición: el retraso en el crecimiento y la obesidad”.
Según las cifras, la proporción de menores con bajo peso de entre 5 y 19 años se redujo del 13 % al 9,2 % entre 2000 y 2025. En contraste, la obesidad pasó del 3 % al 9,4 %, mientras que el sobrepeso en general —que incluye a los niños obesos— afecta hoy a uno de cada cinco escolares y adolescentes, lo que representa aproximadamente 391 millones de casos.
(Vea también: ¿Qué es una enfermedad rara o huérfana? Esto explican los expertos en salud)

En América Latina, 56 millones de menores de entre 5 y 19 años tienen sobrepeso u obesidad, frente a 34 millones en el año 2000.
iStock
América Latina se ubica entre las regiones más afectadas junto con Medio Oriente, el norte de África y América del Norte. La prevalencia de sobrepeso en la región pasó de 34 millones de niños y adolescentes en 2000 a 56 millones en la actualidad. De este total, 20 millones tienen entre 5 y 9 años, otros 20 millones entre 10 y 14 años, y 16 millones son adolescentes de 15 a 19 años.
El informe advierte que el incremento se ha presentado en la mayoría de los países de la región y que 64 % de ellos reportan una prevalencia “muy alta” de sobrepeso en menores de 5 a 19 años. El contraste entre naciones es significativo: mientras Guatemala registra un 23 % de prevalencia, Chile alcanza el 58 %. Este último país concentra además una de las tasas de obesidad más elevadas del mundo, con 27 %, por encima de Estados Unidos y Emiratos Árabes Unidos, ambos con 21 %.
En países como Brasil y México, los casos se concentran en hogares de menores ingresos, ubicados en lo que los expertos llaman “pantanos alimentarios”: zonas urbanas con alta presencia de comida rápida y escasa oferta de alimentos frescos. En Argentina, Chile y México, al menos un tercio de la ingesta calórica de los adolescentes proviene de alimentos y bebidas ultraprocesadas.
(Vea más: Pocos saben de ella: la enfermedad que aún existe en Colombia y cómo prevenirla)

Chile registra una de las tasas de obesidad infantil más altas del mundo con 27 %, por encima de Estados Unidos (21 %).
iStock
El informe advierte que la tendencia tendrá altos costos económicos. Para 2035, el impacto del sobrepeso y la obesidad superará los 4 billones de dólares anuales en el mundo. Solo en Perú, las proyecciones estiman que los costos asociados podrían sobrepasar los 210.000 millones de dólares.
Algunas naciones han empezado a reaccionar. México, donde el 40 % de las calorías que consumen los niños provienen de productos ultraprocesados, prohibió recientemente la venta de alimentos altos en sal, azúcar y grasas en las escuelas públicas, medida que beneficia a más de 34 millones de estudiantes.
Unicef insiste en que los gobiernos deben establecer regulaciones más estrictas sobre etiquetado, publicidad y venta de comida ultraprocesada en entornos escolares. También pide ampliar los programas sociales que garanticen el acceso a dietas saludables. “La obesidad infantil es una emergencia silenciosa que está creciendo ante nuestros ojos. Necesitamos transformar los entornos alimentarios de forma urgente para que todos los niños, sin importar dónde vivan, tengan acceso a alimentos nutritivos y asequibles”, concluyó Russell.
(Lea: El municipio de Boyacá que se ganó el título de la capital de la longaniza)
REDACCIÓN PORTAFOLIO
Portafolio