Una línea ferroviaria reabre este domingo en los Pirineos gracias a una financiación sin precedentes

En un contexto de desvinculación gubernamental de las líneas ferroviarias secundarias, generalmente deficitarias, la región de Occitania ha decidido financiar íntegramente, con 67 millones de euros, la reconstrucción de la línea de 36 km que conecta Montréjeau con Luchon, una estación termal y de deportes de invierno en los Pirineos. Una primicia en Francia.

«Es una de esas líneas que, para el Estado y SNCF-Réseau, no justifican inversión», observa Éric Dansart, experto ferroviario y director del medio especializado Mobilettre. El deterioro de la infraestructura y los daños causados ​​por las inundaciones llevaron a SNCF a cerrar esta línea en 2014, que fue utilizada por los trenes de lujo París-Luchon a principios del siglo XX.

Para la presidenta del PS de la región Occitania, Carole Delga, esta inversión "es una elección política para promover la movilidad baja en carbono, para luchar contra el calentamiento global y la injusticia territorial" .

Según ella, la nueva conexión tiene "una doble función: restablecer un servicio ferroviario público y apoyar el empleo y la economía turística" en una zona afectada por la crisis del termalismo y las incertidumbres que pesan sobre el futuro del esquí.

En la SNCF, la lógica de que las líneas rentables compensaran las pérdidas de las líneas más pequeñas ha terminado. «La nueva prioridad», según el experto ferroviario, «es el RER metropolitano y la recuperación de la red de líneas principales, como Burdeos-Marsella y París-Clermont».

Reabrir una línea TER, continúa, "es una auténtica apuesta. Para que funcione, se necesita una frecuencia suficiente", pero existe "un gran interés por el transporte no por carretera" por parte de los franceses.

La región no cuenta con una rentabilidad financiera inmediata. Por otro lado, sí existe rentabilidad a medio y largo plazo, para los jóvenes y el planeta, asegura Carole Delga. Con el lema "Pequeñas líneas, gran causa", la presidenta de Regiones de Francia lanzó la semana pasada un llamamiento a la movilización para salvar 4.000 líneas sin financiación, proponiendo transferir una parte de los ingresos de las autopistas al ferrocarril.

Para el alcalde independiente de Luchon, Éric Azémar, la llegada del tren "contribuye a la revitalización" de la estación. "Es esencial para su atractivo, tanto para los turistas, los clientes del balneario, los esquiadores, como para la apertura de la zona", afirma el alcalde, quien espera "retomar la senda" tras los años de la COVID-19.

Se espera que una oferta combinada de billetes de Thermes-Rail y Ski-Rail (incluido un paquete) atraiga nuevos clientes. «Observamos una disminución en el número de visitantes al balneario cuando desapareció el tren», señala.

Philippe Liauzun, que lleva diez años luchando por el regreso del tren con la asociación Cdric, considera que se corregirá un "desequilibrio territorial" y recuerda que la línea se inauguró en 1873, cuando Luchon era apodada "la reina de los Pirineos" .

Inicialmente, el servicio se prestará mediante trenes híbridos con motores de combustión alimentados por biocombustible, antes de que los trenes de hidrógeno entren en servicio el próximo año. Para finales de 2026, la línea será un auténtico escenario de innovación, cuando entren en servicio los trenes de hidrógeno que Alstom está perfeccionando en su fábrica de Tarbes.

"A continuación, se instalará una estación para recargar el tren con hidrógeno en la estación de Luchon", explica el responsable del proyecto, Matthieu Schwebel.

Se trata de la segunda línea TER que se reabre en Occitania, después de la de la margen derecha del Ródano en el Gard, que hasta 2022 solo se utilizaba para el transporte de mercancías.