Canadá invita al rey Carlos III a inaugurar el Parlamento en una iniciativa poco común: fuentes


NOTA DEL EDITOR: La última vez que la reina Isabel II inauguró una sesión del Parlamento canadiense fue en 1977, no en 1957, como se indicaba en el artículo anterior. En 1957, inauguró un nuevo Parlamento, en lugar de una sesión de uno ya existente. Esta información ha sido actualizada.
Canadá ha extendido una invitación al Rey Carlos III para abrir el Parlamento en las próximas semanas, según informaron varias fuentes a Global News.
De aceptarse, sería la primera vez que un soberano inaugura el Parlamento desde que la reina Isabel II lo hizo por última vez en 1977.
Fuentes dijeron a Global News que es probable que asista, pero el Palacio de Buckingham no lo ha aceptado oficialmente y, debido al protocolo, el Palacio tendría que proporcionar una confirmación.
Cuando un soberano abre el Parlamento, es él quien pronuncia el Discurso del Trono que describe lo que el gobierno planea para su mandato y sus prioridades inmediatas.
Los Liberales se disponen a formar un gobierno minoritario tras las elecciones del lunes y se prevé que obtengan 168 escaños, aunque aún están pendientes dos recuentos. Los Conservadores formarán la Oposición Oficial con 144 escaños, mientras que el Bloque obtuvo 23, el NDP siete y los Verdes uno.

Aún no se conoce la fecha en la que el Rey podría abrir el Parlamento.

Sin embargo, el calendario de sesiones de la Cámara de los Comunes actualmente tiene el 26 de mayo como la primera fecha de sesión para los parlamentarios, aunque eso aún podría cambiar.
El regreso de un nuevo Parlamento verá la elección del Presidente, seguida del Discurso del Trono, normalmente pronunciado por el gobernador general como representante de la Corona.
La posible visita del Rey también ocurre en un momento en el que la soberanía de Canadá ha sido amenazada repetidamente por el presidente estadounidense Donald Trump, quien ha dicho varias veces desde su reelección que Canadá debería ser el "estado 51".
Esa retórica, así como los aranceles de Trump, se convirtieron en un foco clave de la campaña electoral federal, con los líderes de los partidos planteando la cuestión de quién podría enfrentarse mejor y negociar con el presidente.
En los días posteriores a la elección, Trump felicitó a Carney por su victoria y dijo que espera reunirse con el primer ministro en la Casa Blanca en los próximos días, añadiendo que creía que una "gran relación" con Canadá era posible bajo el liderazgo de Carney.