Bezos y Musk: rivales espaciales que ahora colaboran por necesidad

Durante años, Jeff Bezos y Elon Musk han protagonizado una de las rivalidades más sonadas de la era tecnológica. Uno, fundador de Amazon y Blue Origin; el otro, líder de SpaceX y Tesla. Ambos con el mismo sueño: conquistar el espacio.
Pero lo que pocos imaginaban es que, en 2025, estos dos titanes acabarían trabajando juntos. La razón no es un cambio repentino de amistad, sino una necesidad estratégica que está redefiniendo la carrera espacial.
Hace apenas unos días, un Falcon 9 de SpaceX realizó su lanzamiento número 100 del año, transportando nada menos que 24 satélites del Proyecto Kuiper, la apuesta de Amazon para competir con Starlink. Sí, el servicio de internet satelital… de Musk.
No es la primera vez que ocurre. SpaceX ya había lanzado satélites para Amazon en el pasado, a pesar de que Bezos tiene su propia compañía espacial, Blue Origin. El motivo es simple: SpaceX ofrece el mejor precio por kilogramo gracias a la reutilización de la primera etapa del Falcon 9.
En un sector donde cada kilogramo enviado al espacio cuenta, Musk ha capitalizado su ventaja tecnológica. Con un coste aproximado de 13,7 millones de euros por lanzamiento parcial reutilizable, SpaceX ofrece una opción rápida, eficiente y mucho más barata que la competencia.
Esto ha llevado a que empresas competidoras —como OneWeb, AST SpaceMobile e incluso Northrop Grumman— contraten sus servicios. Y, en un contexto donde cohetes como Proton y Soyuz están fuera del mercado y otros como Ariane 6 o New Glenn sufren retrasos, la oferta de Musk es casi insustituible.
Amazon ya cuenta con 100 satélites del Proyecto Kuiper en órbita y otros 100 listos para despegar. Aunque está lejos de los más de 5.000 satélites de Starlink, Bezos sabe que acelerar el despliegue es crucial para no quedarse atrás en la carrera por el internet satelital global.
Por eso, la compañía ha contratado tres lanzamientos más con SpaceX. No es una alianza amistosa, sino un acuerdo que beneficia a ambos: Bezos consigue velocidad y Musk ingresos para reinvertir en Starlink y el ambicioso Starship.
El panorama espacial actual combina competencia feroz con colaboraciones inesperadas. Musk podría mantener el liderazgo gracias a su flota y su capacidad de lanzamiento, pero Bezos cuenta con el músculo financiero y la infraestructura de Amazon.
Lo que está claro es que, en esta nueva era, incluso los rivales más acérrimos pueden acabar sentados en la misma mesa… o en el mismo cohete.
La Verdad Yucatán