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Descubra cuáles son los lugares favoritos de los portugueses para sus vacaciones de verano

Descubra cuáles son los lugares favoritos de los portugueses para sus vacaciones de verano

El verano es la época del año en la que los portugueses buscan con más intensidad nuevas experiencias y momentos de relax, ya sea bajo el sol o descubriendo nuevos destinos. Y, a medida que se diversifican las opciones de viaje, sus preferencias también cambian, reflejando un equilibrio entre tradición e innovación. Pero ¿adónde van los portugueses? ¿Cuáles son sus destinos favoritos? ¿Han cambiado las tendencias en los últimos años?

El último estudio de Jetcost revela que las búsquedas de alojamiento en julio aumentaron un 8% respecto a julio del año pasado, que ya era un récord.

Y en cuanto a las preferencias por las regiones portuguesas, el top 5 lo ocupan Funchal, Albufeira, Porto Santo, Figueira da Foz y Ponta Delgada.

Está claro que a los portugueses les gusta ir de vacaciones al campo y que sol y playa siguen siendo una combinación muy popular, pero con el paso de los años la tendencia ha ido cambiando y también resulta más barato ir de vacaciones a otros destinos extranjeros que a algunos nacionales, como el Algarve.

Para Tiago Encarnação, director operativo de la agencia de viajes Lusanova, no hay duda: “La playa sigue siendo uno de los principales motivos de viaje de los turistas portugueses, junto con su interés por las experiencias culturales”, explicando a nuestro periódico que, a nivel nacional, las Azores y Madeira siguen estando entre los destinos más buscados.

Mirando hacia Europa, “España e Italia siguen liderando las preferencias vacacionales, seguidas de destinos como las capitales de Europa Central, Inglaterra, Escocia, Croacia, Albania, Grecia y Turquía”.

Fuera del continente europeo se encuentran destinos como Marruecos y Egipto.

En cuanto a destinos de playa, «hemos observado una demanda significativa de islas del océano Índico, como Maldivas o Mauricio, junto con ciudades como Estambul o Dubái. El Sudeste Asiático también ha experimentado un crecimiento, destacando Tailandia, Vietnam, Camboya y Malasia», revela Tiago Encarnação.

Después, la atención se centra en Brasil, que “viene atrayendo un creciente interés, no sólo por sus playas icónicas, sino también por itinerarios con un fuerte componente cultural, que incluyen ciudades históricas, patrimonio colonial y experiencias vinculadas a la naturaleza y las tradiciones locales”.

Este año, en particular, el director de operaciones de Lusanova menciona Japón, que «ha demostrado ser un destino con un fuerte crecimiento en nuestra oferta de larga distancia, impulsado por la Expo 2025, que está atrayendo la atención de los viajeros portugueses. China también ha estado atrayendo más atención de los viajeros portugueses».

Nuno Mateus, director general de Solférias, afirma que el destino predilecto de los clientes de su agencia es, una vez más, Cabo Verde, que «está batiendo récords este año». Estas «altas cifras» se deben no solo a que «cada vez hay más vuelos a Cabo Verde», sino también a que el país siempre está en temporada alta y es un destino de sol y playa. La demanda es tan alta que Nuno Mateus predice que será necesario construir más hoteles en Cabo Verde.

Otro destino con un crecimiento exponencial respecto al año pasado es Egipto. Túnez, Senegal y París también destacan.

Al igual que Lusanova, Solférias también destaca a Brasil. «Hubo buenos periodos, luego hubo pérdidas, pero este año las ventas a Brasil son muy fuertes. Este año, Brasil batió su récord de turistas extranjeros. Está teniendo un buen desempeño y es muy recomendable», afirma Nuno Mateus.

Y habla de un “fenómeno” que es el hecho de que haya más vuelos disponibles hacia Oriente Medio y Asia, lo que acaba beneficiando mucho a destinos como Maldivas, Mauricio o Zanzíbar.

Evolución de las opciones

Al preguntarle si las tendencias de viajes portuguesas han cambiado a lo largo de los años, Tiago Encarnação explica: «Hemos observado una clara evolución en las preferencias de los viajeros portugueses». ¿Y cómo? «Si bien antes se priorizaban los destinos de corta distancia y los programas más estandarizados, hoy observamos un creciente interés en viajes más inmersivos y diferenciados con mayor valor añadido», recordando que «la pandemia también influyó en este comportamiento, fomentando una mayor apreciación del tiempo y la experiencia vivida durante el viaje».

El director operativo de Lusanova afirma que la demanda de destinos de larga distancia “ha ido creciendo, al igual que el deseo de experiencias culturales auténticas y un contacto más cercano con las comunidades locales”.

Por su parte, Nuno Mateus añade que «hay cambios, como es obvio», argumentando que «la forma más sencilla de entender el turismo es que si algo no te gusta por alguna razón, no vas. El turismo se basa en los detalles. Las tendencias están cambiando, pero las cifras superan claramente las del año pasado, destacando también Dubái, Santo Tomé y Príncipe y Marruecos, entre otros. «Veinte destinos dominan el mercado; por supuesto, en verano se centran principalmente en las vacaciones de ocio; a la gente le gusta mucho el sol y la playa», afirma.

¿Y cuánto gastan?

En cuanto al gasto de los portugueses en vacaciones, es difícil estimarlo, sobre todo porque existe una amplia gama de opciones y las ofertas son a gran escala. «Los precios varían considerablemente según el tipo de viaje, el destino elegido y el grado de personalización de la experiencia», explica Tiago Encarnação. En general, «los programas de grupo a destinos más cercanos suelen ser más asequibles, mientras que los viajes de larga distancia o privados, con itinerarios totalmente personalizados, representan una mayor inversión». Los precios han oscilado entre 300 y 3500 euros, «según el producto, y pueden fluctuar naturalmente en función de la antelación con la que se realiza la reserva, la disponibilidad en el momento de la compra, las tarifas aéreas aplicables y los servicios y visitas incluidos en cada programa», destacando que Lusanova se ha centrado en responder a este nuevo perfil de viajero, «que valora cada vez más la calidad, la comodidad y la diferenciación en la experiencia de viaje».

Nuno Mateus también afirma que es difícil realizar esta encuesta, pero habla de un promedio de mil euros. «De hecho, hay muchos más pasajeros viajando y esta tendencia es notable, y puede deberse a dos razones: por supuesto, al crecimiento del mercado y, en segundo lugar, a un mayor interés del mercado por buscar agencias de viajes», afirma.

Vacaciones más personalizadas

También intenté comprender cuáles han sido los mayores deseos de los portugueses para averiguar si buscan, por ejemplo, viajes más personalizados y si los principales destinos son lugares muy turísticos. «Hemos observado una demanda cada vez más diversificada, lo que no refleja un cambio de tendencias, sino una ampliación de las preferencias de los clientes», afirma Tiago Encarnação. «Muchos viajeros siguen buscando circuitos regulares y más económicos, una fórmula con una excelente relación calidad-precio, mientras que, al mismo tiempo, crece el número de personas interesadas en experiencias más exclusivas, con un mayor grado de personalización».

Una de las tendencias más destacadas, añade, «es precisamente la demanda de viajes a medida, totalmente adaptados a los gustos, preferencias y necesidades de cada cliente. Este tipo de solución es especialmente valorada por quienes buscan exclusividad, flexibilidad horaria y una cuidada selección de experiencias, alojamiento y servicios». Por otro lado, en Lusanova, «sigue habiendo una fuerte demanda de viajes en grupo a destinos de larga distancia, una opción que ofrece mayor tranquilidad y seguridad, ya que todo está previamente organizado y los viajeros cuentan con el apoyo permanente de un guía de Lusanova, que habla portugués, durante todo el trayecto».

Y lo cierto es que parece que hay una creciente necesidad de viajar durante esta época del verano. «El verano sigue siendo, por excelencia, la época favorita de los portugueses para viajar. Este comportamiento está naturalmente ligado a varios factores, como el calendario de vacaciones escolares, el cierre de muchas empresas y, por supuesto, las condiciones meteorológicas más propicias, que hacen de esta época un periodo especialmente atractivo para unas merecidas vacaciones anuales. Por lo tanto, se espera que el verano de 2025 siga registrando una fuerte demanda», predice el director operativo de Lusanova.

Aun así, comenta a i , «hemos estado presenciando un cambio gradual en los hábitos de los viajeros portugueses, que están empezando a diversificar sus opciones a lo largo del año. Las vacaciones en Navidad, Semana Santa o incluso en puentes han ganado popularidad. Además, quienes tienen mayor flexibilidad, como autónomos , jubilados o profesionales con un régimen híbrido, tienden a preferir los viajes en temporada baja o durante las llamadas temporadas medias , lo que les permite no solo evitar las grandes aglomeraciones, sino también beneficiarse de precios más competitivos y otras experiencias en los destinos».

¿Registro de viajes?

Tras evaluar las tendencias de los viajes vacacionales portugueses, ¿podemos afirmar que es cierto que los viajes de verano de los portugueses se han disparado y están batiendo récords? «No diría que la demanda se ha disparado, sobre todo porque se trata de una tendencia de crecimiento que hemos observado en los últimos dos años», comenta Tiago Encarnação. Lo más acertado, en su opinión, «sería decir que la demanda ha mantenido un ritmo de crecimiento constante, aunque no necesariamente más significativo que el año pasado». Sin embargo, también afirma que «cada vez es más evidente que viajar se ha convertido en un componente esencial del bienestar para muchos portugueses, ya sea por momentos de auténtica relajación o por el deseo de descubrir nuevas culturas».

Nuno Mateus, por su parte, no tiene dudas: «Este récord es cierto». «Creo que hay un aspecto muy importante relacionado con la nueva generación: existe una cultura entre los jóvenes que, hoy en día, tienen veintitantos años o más y están acostumbrados a viajar con sus padres. Los jóvenes tienen una particularidad ligeramente diferente a la de las personas mayores: el turismo ya forma parte de la vida de la gente, no lo abandonan. Y hoy vemos a muchas parejas jóvenes viajando. Y diría que suele ser más barato viajar al extranjero que aquí», concluye el director de Solférias.

Estudio: el clima provoca cambios

Y en un momento de aumento de fenómenos meteorológicos como olas de calor, tormentas, incendios forestales e inundaciones, los portugueses son cada vez más conscientes del impacto del clima en sus viajes. Al menos eso revela el último estudio de eDreams.

El aspecto más positivo de este estudio es que la gran mayoría (69%) de los viajeros portugueses nunca se han visto afectados por fenómenos meteorológicos extremos durante sus viajes. Sin embargo, uno de cada tres (31%) ya se ha visto obligado a cambiar sus planes de vacaciones debido a condiciones meteorológicas adversas.

De estos últimos, algunos pudieron cambiar sus vacaciones sin coste adicional gracias a las políticas de reserva flexibles (15%), pero otros tuvieron que pagar para cambiar su viaje (11%). Y aún hubo quienes (5%) no pudieron cambiar sus planes debido a las condiciones de reserva inflexibles. «Ante este panorama, se entiende que la flexibilidad en las reservas debería valorarse cada vez más, permitiéndoles afrontar con mayor certeza fenómenos que no pueden controlar», revela eDreams.

Por otro lado, los jóvenes parecen ser los más sensibles al impacto del clima en los viajes: la mitad de los encuestados de entre 18 y 24 años (50%) ya han cambiado o han querido cambiar sus planes de viaje debido al clima, en comparación con una pequeña minoría entre los mayores de 65 años (9%).

Jornal Sol

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