José Luís Carneiro, el candidato al peor puesto en política

José Luís Carneiro ha pasado los últimos días al teléfono. Hay muchas conversaciones y todas tienen un mismo objetivo: unir al PS, después del momento más traumático de su historia. No es ahora cuando Carneiro ha estado construyendo puentes dentro del partido. Este trabajo comenzó cuando, en 2019, António Costa lo eligió para suceder a Ana Catarina Mendes en el cargo de secretario general adjunto, una invención de Costa para mantener la conexión con las bases. Hasta entonces, Zé Luís (como se le conoce en el PS) era secretario de Estado de las Comunidades Portuguesas, después de haber sido alcalde de Baião entre 2005 y 2015. Una de sus tareas como secretario general adjunto era recorrer las estructuras socialistas de norte a sur, y eso fue lo que hizo.

Siempre muy atento en sus contactos, José Luís Carneiro ganó simpatía y reputación de moderado, que llevó a la disputa por el liderazgo con Pedro Nuno Santos. Pero ahora que Pedro Nuno ha dimitido, humillado por la derrota socialista más traumática de la historia, Carneiro quiere disipar la idea de que hay radicales y moderados en el PS. El único candidato al liderazgo hasta el momento quiere unir a todos. El problema es que la Secretaría, el único órgano que puede cambiarse ante el Congreso, sólo tiene 15 escaños y, como explica un partidario de Carneiro, “no caben todos”. Aún así, el mensaje que se ha trasladado es que “hay otros organismos en los que pueden ser útiles”, entre ellos la Oficina de Estudios del partido, que quiere fomentar la reflexión sobre cómo revertir la derrota electoral.