Un pueblo lleno de historia en Artvin: las casas centenarias se han convertido en las favoritas entre los entusiastas de la fotografía.

Las casas del barrio Öteki Bağlığı de la aldea, cuyo acceso está limitado por senderos, se construyeron con gran esfuerzo, aprovechando los recursos disponibles en aquel momento. Los lugareños las levantaron cargando bloques de piedra a sus espaldas.

Construidas sobre cimientos de piedra, las estructuras utilizaban exclusivamente enebro. Las casas de dos o tres plantas incluían graneros y pérgolas. Las plantas bajas se utilizaban generalmente como refugios para animales, mientras que las plantas altas servían como viviendas y almacenes.

El barrio, que con el tiempo dejó de ser un espacio habitable permanente, ahora se utiliza como alojamiento de corta duración durante las temporadas de recogida de aceitunas y riego.

Visibles desde la carretera gracias a su ubicación en la ladera, las casas también han atraído la atención de los aficionados a la fotografía en los últimos años. Las históricas estructuras de piedra y madera se han convertido en un destino popular para los amantes de la naturaleza y la fotografía que visitan la zona.

Uğur Çelik, residente local, comentó: «Este es un viñedo rural establecido hace años en el valle del río Çoruh, principalmente para el cultivo de olivos. El acceso a estas casas es solo por senderos. Todo lo que se ve aquí es una estructura que la gente construyó a cuestas».